El sitio no tiene ningún encanto. Nos sirvió para parar una noche en ruta, pero nada más. Es gratuito, hay plazas planas y bastante tranquilo. Está muy sucio. Tiene varios niveles en los que se puede aparcar. En el de arriba al fondo había cuatro autocaravanas aparcadas, aunque no parecían de paso. El restaurante está muy cerca y tiene servicio para llevar.