Lugar muy tranquilo, rodeado de viñedos, con un restaurante con un menú barbacoa y acogedora terraza cubierta por toldos y moreras. El único inconveniente es que tienen música todo el día bastante fuerte. Hay una zona de acampada señalizada, y lavabo abierto toda la noche. (colaboración de 5€ ) Despiértate con fantásticas vistas a los viñedos con Montserrat al fondo y contempla la puesta de sol.