Este sitio era una maravilla para la gente de la isla y quienes llevamos años viniendo con la furgo tranquilamente a disfrutar de la naturaleza respetando el lugar y al resto de personas.Ahora está empezando a estar lleno de gente- sobretodo coches- de turistas con música a todo volumen, gritando, dejando basura detrás, encarándose si les dices algo al respecto y jodiendo todo. Una pena.