Paramos a comer y no me gustó casi nada,el sitio está súper sucio,no admiten perros en la zona de picnic y además había un hombre extraño que no paraba de mirarnos y de dar vueltas con su mini coche,a tal punto que me asustó y tuvimos que irnos ya que viajo sola con mi hijo.Lo único bueno que hay agua para lavar algunas cosas y un poco de sombra.